Un periódico «para quien quiera entender»

caixaban desmontando la caixa

Redacción, 21 de julio de 2022

El pasado 10 de enero salió a la luz este periódico, caixabankia.com  Desde entonces, dos  o tres veces  a la semana,  ofrece a sus lectores noticias exclusivas sobre uno de los mayores escándalos empresariales y financieros de nuestro país, CaixaBank.

Obsérvese que el parecido de los dos nombres -el del periódico y el banco- es grande, pero no son idénticos. Conviene no distraerse.

Quizá por eso, el mismo día de su salida, los editores del periódico recibieron desde un despacho de la Oficina de Patentes y Marcas de la Avenida Diagonal de Barcelona, (donde están ubicadas Las Torres Caixa) un requerimiento en relación con el uso del dominio. Ni caso, claro. 

Quiénes somos 

En la tercera pestaña de este espacio que están ustedes leyendo aparece una leyenda: Quiénes somos. No siempre se leen esas pestañas, que parece que están de rondón. Pero son importantes. En la nuestra dice, entre otras cosas, que este periódico ha sido fundado por un grupo de profesionales que persigue «aportar su conocimiento y sus herramientas informativas al esclarecimiento y la transparencia del enmarañado y opaco sector bancario español» y, específicamente, a la larga y oscura historia de la fusión entre Bankia (Caja Madrid) y La Caixa.

En ello estamos. Nacimos hace once años, aunque hasta hace seis meses nos hemos limitado a observar. Llevamos publicadas casi un centenar de piezas, todas ellas de la máxima calidad informativa, poniendo, negro sobre blanco, los entresijos de la nueva CaixaBank, las trampas a sus clientes, el maltrato a sus empleados, los enredos de sus accionistas. Hemos contado cosas que nadie sabía sobre los oscuros pactos entre Fainé  y la corona o sobre los agobios del gobierno para seguir perdiendo a espuertas el dinero de todos sin que se le caiga la cara de vergúenza.

Amigos y enemigos

En seis meses hemos hecho amigos y nos tememos que también algunos enemigos. Entre los amigos, aquellos que nos llaman para animarnos, o para darnos exclusivas, o simplemente pinchan en nuestros periódico o en nuestra newsletter. Gracias de verdad: el retorno que estos lectores nos envían es crucial para saber que no vamos desencaminados.

¿Enemigos? Puede que alguno, y que eso explique que nos hayan cerrado tres veces la cuenta de Twitter. A lo mejor a Goirigolzarri no le gusta la foto que sacamos de él. O Gortázar habría preferido que no contáramos lo de su apañadita vivienda. Y en cuanto a Fainé, ¿le habrá hecho gracia que reveláramos lo de que jugaba a la teja con Rato en las Torres KIO? ¡Cuánto le gustaría a María Luisa Martínez que llamáramos a su puerta para pedirle publicidad! ¿Qué nos diría?

Queda mucho por contar

Algún amigo nos ha advertido si estar tan focalizados no nos hará quedarnos sin temas. Ya nos gustaría. Eso querría decir que las prácticas abusivas del sistema bancario habrían desaparecido, que la permisividad del gobierno y los órganos reguladores se habría volatilizado. Querría decir que somos todos felices.

Pero no. Al menos en este ámbito, no somos todavía felices. Y lo vamos a seguir contando. A base de scoop incontestables, porque nosotros no vertemos opiniones: solo hechos, y hechos, que, por lo general, nos cuentan otros.

Nuestro objetivo es generar una reacción  para que el sistema financiero aporte un mayor valor social mediante prácticas adaptadas a una actuación más ética en su actividad financiera y de servicios. Y vamos a estar ahí hasta que lo consigamos.

Gracias, lectores, por acompañarnos.