Junta General de Accionistas de CaixaBank

El próximo día 8, CaixaBank celebrará su Junta de Accionistas y en ella se aprobará un generoso pago por dividendo que alcanzará los 1.179,3 millones de euros. Asimismo, aprobará la recompra del 10% de sus acciones. De devolver algo al Estado ni se habla y, mientras tanto, los ajustes en las oficinas siguen avanzando. En resumen, contribuyentes, clientes y empleados seremos los paganos de tan suculentos beneficios.

El pay out (porcentaje del beneficio destinado a retribuir al accionista) es de los más generosos entre las empresas cotizadas españolas (entre el 50 y el 60%) porque CaixaBank cuenta con una elevada ratio de capital de máxima calidad, por encima de la de sus principales rivales.

Menos y peor servicio

Entretanto, la baja de 6.500 trabajadores en todo el país ha provocado un descenso en la calidad del servicio que afecta por igual a trabajadores y a clientes. Los primeros se encuentran en «una situación insostenible, soportando una presión comercial como nunca antes. «Estamos en el punto de mira de la opinión pública, dando la cara ante los clientes cuando son los de arriba los que tienen que buscar soluciones», como ha señalado estos días el líder sindical Daniel Álvarez Junco.

El pasado día 22 de febrero, más de 8.000 trabajadores de CaixaBank se echaron a la calle para protestar por las insoportables condiciones en que se encuentran. Al tiempo, los clientes inundan las redes sociales con quejas contra el maltrato que reciben en la entidad. Mientras, los medios convencionales, adecuadamente engrasados desde la Dirección de Comunicación, insisten, contra toda evidencia, en que «CaixaBank amplia su equipo de atención a clientes».

En resumen, de los tres grandes grupos de interés (o stakeholders, como dicen los cursis) solo uno sale ganando con la gestión del dúo Goirigolzarri/Goztázar: los accionistas. 

Todos los accionistas, menos el Estado, que recibe el dividendo que le corresponde por su 16%, pero ni un solo euro de retorno de los miles de millones que enterró en Bankia.

¿Dirá algo sobre esto el día 8 Teresa Santero, representante del FROB en el Consejo de CaixaBank?